Es muy importante hacer cinco comidas al día (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena). Aquí tienes un ejemplo de dieta para que, al empezar en el gimnasio, puedas llevar una dieta sana y equilibrada sin ningún problema: Desayuno : una pieza de fruta (o zumo de naranja), un vaso de leche y un bol de cereales (copos de avena, preferiblemente). No hagas trampas y evita los cereales de chocolate o que contengan mucho azúcar. Almuerzo: un pequeño bocadillo o sándwich de queso o pavo , evitando embutido con más grasa, como el jamón serrano o el chorizo. Si te quedas con hambre antes de la comida, puedes comer un puñado de almendras o nueces . Comida: ensalada y un plato de alimentos que contengan una gran cantidad de carbohidratos, como la pasta o el arroz . De postre, puedes tomar una pieza de fruta (plátano si todavía no has entrenado y pera, manzana, naranja u otras frutas con gran cantidad de agua si ya lo has hecho). Merienda: es la comida más traicionera del día,